Deseo II
Guárdame en un suspiro del alma.
Guárdame de mis miedos…de los miedos.
Arrópame con tu presencia, con esa ausencia tan presente.
Por que solo entonces, cuando mis defensas descansen en la silla junto a mi ropa.
Solo entonces, seré vulnerable.
En ese tiempo en que minutos y horas se juntan revoltosos, sin saber quien es quien,
indecisos del tiempo.
Guárdame en ese suspiro del alma, en esa cama que no es mi cama.
En ese tiempo de reloj sin manecillas que marquen su pasar, guárdame.
Arropa mis parpados para que la noche por fin, me deje rendirme sin temor.
Guárdame esta noche en un suspiro del alma.
Dejad miedos de la luz que el suave tul de la oscuridad cubra mi cuerpo.
No tengáis prisa, mañana, cuando claree el día, cuando mis pies toquen las frías losas de la realidad, me tendréis enfrente como cada día.
Lucharemos sin buscar vencer o perder, solo sobreviviremos hasta la siguiente épica.
Pero mientras tanto…Dejad que con un efímero he invisible beso, ella cierre con siete llaves mis parpados.
Con ese beso que cada noche, siento al traspasar el umbral y me da la paz…antes de alejarse de mi.
2 comentarios:
Precioso Carles : )
Preciosas reflexiones sobre el deseo...Ese ingrato que nos deja la boca seca y el alma herida...¡Si al menos fuera siempre correspondido! ¡Si una mirada de fiebre no reflejase a veces el hielo del desamor!
Me ha encantado AMO, como todo lo que escribes. Como nuestros encuentros fugaces en la inmensidad de este mar de Internet´...
Gracias
Un beso
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